En un mundo que cambia constantemente, el aprendizaje continuo es la habilidad más útil.
Sin embargo, nos han enseñado que aprender es memorizar y conocer el nombre de las cosas, cuando en realidad, el aprendizaje sólo se da cuando las comprendemos.
Cuenta la leyenda que el Premio Nobel de Física, Max Planck recorrió Alemania dando una y otra vez la misma charla sobre mecánica cuántica. Después de darla tantas veces, su chófer se la aprendió de memoria y, según cuenta la historia, un día le dijo:
“Mire, Profesor, ¿no se aburre usted de esta rutina? Le propongo una cosa: en la charla que tiene que dar en Múnich mañana, déjeme que sea yo quien exponga y usted se sienta en primera fila con mi gorra de chófer, ¿le parece?”
Total, que Planck aceptó. Al día siguiente se plantaron en Múnich.
El chófer haciéndose pasar por Planck y Planck haciéndose pasar por el chófer.
Y el chófer dio la charla completa, de principio a fin. Hasta que llegó el turno de las preguntas y un profesor de física se levantó y, desde el público, le hizo una pregunta súper complicada. A lo que el chófer, ni corto ni perezoso, respondió:
“Me sorprende recibir una pregunta así en una ciudad tan avanzada como Múnich. Es tan básica que voy a dejar que sea mi chófer el que responda”
Pensamos que el conocimiento es saber el nombre de las cosas, cuando en realidad tiene mucho más que ver con entenderlas.
El mundo cambia cada vez más rápido, y la única manera de seguirle el ritmo es estar en permanente evolución.
Pero tan importante como aprender constantemente cada día es aprender bien.
LA TÉCNICA FEYNMAN
Aprende las cosas como si fueras a explicárselas a un niño.
Richard Feynman, además de ser un brillantísimo físico, fue un gran divulgador y tenía fama de ser un profesor fantástico.
Feynman dio un famoso discurso en 1974 del que salió una frase que le ha acompañado siempre:
“El primer principio es que no debes engañarte a ti mismo – y eres la persona más fácil de engañar”
– Richard P. Feynman
Su técnica de aprendizaje tiene cuatro pasos:
El primero es enseñárselo a un niño.
Cuando no entendemos bien las cosas, tendemos a usar palabras complicadas para explicarlas. Y normalmente lo que pasa es que estamos haciendo justo aquello de lo que nos prevenía Feynman: nos engañamos a nosotros mismos, enmascaramos partes que no entendemos del todo utilizando una jerga técnica o complicada.
Así que cuando escribes una idea en la forma más básica de la que eres capaz, para que un niño pueda entenderla, te fuerzas a profundizar en el concepto y a simplificar la relación y conexiones entre las ideas.
El segundo paso: repasar.
Al terminar el paso anterior, habrás identificado partes en las que se te olvida algo, no eres realmente capaz de explicarlo o te cuesta relacionarlo con un concepto importante.
Es decir: que has encontrado el límite de tu conocimiento. Y aquí es donde toca volver a la fuente y releer o buscar más explicaciones sobre las lagunas que has encontrado.
El tercer paso Una vez que lo hayas repasado, vuelves con ese conocimiento nuevo y adaptas tu explicación. Y repites este ciclo una y otra vez, estos tres pasos. Hasta que seas capaz de explicárselo a un niño de 8 años.
El cuarto paso consiste en transmitir realmente ese conocimiento. Si quieres asegurarte de tu conocimiento no hay nada mejor que ponerte a prueba explicándoselo a alguien que no sepa del tema.
MENTALIDAD FIJA VS MENTALIDAD DE CRECIMIENTO
La mentalidad fija es la de quienes piensan que sus capacidades son innatas y no van a cambiar con el tiempo. La mentalidad de crecimiento es la de quienes abordan sus límites como una oportunidad para crecer.
La primera es cuando pensamos que tenemos unas capacidades innatas que al final determinan nuestro éxito en lo que sea que queramos hacer. Esta es la mentalidad delos niños que se sintieron fracasados.
Y si piensas que sólo tienes una cantidad fija de inteligencia o una forma de ser fija te obligas a ti mismo a demostrar constantemente que es suficiente o apropiada. Cada situación se convierte en un todo o nada: “¿seré lo suficientemente listo como para conseguir ese trabajo?”
La segunda mentalidad es la quienes abordan sus límites como una oportunidad de crecer.
Es decir, que tus capacidades no son aquello con lo que vas a afrontar todos los retos de tu vida, sino el punto de partida de tu desarrollo. Esta mentalidad se basa en creer que tus capacidades se pueden cultivar. Evidentemente, los fallos o el fracaso son siempre experiencias dolorosas, pero con esta mentalidad no dejas que te definan ni limiten. Hay una frase que resume esto de una forma muy acertada: “Aprende la lección y olvida el error”.
BUFFETT Y MUNGER
Son dos de los empresarios e inversores más exitosos de los Estados Unidos.
¿Cuál es la clave de su éxito?
Siempre dicen que su principal objetivo ha sido, simplemente, irse a la cama cada noche siendo más listos que al despertarse. Porque el aprendizaje, como prácticamente todo lo que hacemos de manera constante, acaba teniendo efectos exponenciales.
Para empezar, hay que encontrar un tiempo para dedicar a aprender. Pero este problema lo tiene todo el mundo: lo tienes tú y lo tienen Buffet y Munger y cualquiera.
También hay muchas tentaciones que evitar. Es mucho más cómodo dedicar una hora a hacer mil cosas a la vez como ver una serie mientras estás en instagram o charlas por whatsapp. El esfuerzo que requiere hacer eso es prácticamente nulo.
Pero, ¿cuál es el coste de oportunidad de matar el tiempo así? A corto plazo, vaguear frente a la tele o con el whatsapp nos es cómodo y nos genera dosis de dopamina que nos hacen sentir bien. Pero esas horas no las vamos a recuperar y rara vez nos aportan algo que nos acompañe el resto de nuestra vida.
El ocio también es fundamental y también nos ayuda a crecer. Pero poner un poco de esfuerzo o de intención en la manera en la que elegimos entretenernos puede significar grandes diferencias a largo plazo. cómo aprender mejor: tenemos que aprender a leer.
No es lo mismo leer para informarte o entretenerte, que para absorber conceptos y entenderlos. Para empezar, aprender significa encontrar autores que sepan más que nosotros de un tema e intentar acortar la distancia que nos separa de ellos.
Fuente: https://www.jaimerodriguezdesantiago.com/